martes, diciembre 02, 2014

¡Qué bonita vecindad!

En esto días que la muerte de Gómez Bolaños ha resultado más importante que el incendio de los Pantanos y la aprobación del Presupuesto 2015 me detuve a pensar en la huella que ha dejado en varias generaciones personajes que hoy me hacen reflexionar.

Las mujeres en la vecindad del Chavo parten de un estereotipo de la sociedad machista, quizás como consecuencia del machismo latino y especialmente mejicano. Me detengo en resaltar algunas características de estas.

a.    La Bruja del 71: una solterona amargada, odia a los niños, es fea y vieja. Terminaba malogrando siempre la poca diversión de la vecindad. Su presencia, por sí misma ya representaba el final de la alegría. No obstante, eso sí: al toque se ponía calentona al máximo ante la presencia de don Ramón, ergo… aguafiestas, aguantada y reprimida.

b.    Doña Florinda: viuda (abandonada), discriminadora –no te juntes con esa chusma- , amargada igual que su vecina, sin tiempo para sacarse los ruleros de la cabeza. Por encima de todo, madre castrante que no deja crecer al hijo manganzón y de nuevo, al igual que su vecina: arrecha ante la presencia del macho: el profesor Girafales. De nuevo una mujer aguantada y reprimida.

c.    La Chilindrina: manipuladora al máximo, niñita antipática, que busca siempre jalar agua para su molino. Aprovecha al máximo al padre, utiliza al Chavo y recurre al llanto cada vez que la ocasión lo amerita: invencible por sus lágrimas.

d.    La Pompis: la niña “putona” que hasta enseña un poco más su calzón con bobos para que los babosos de los niños le cumplan con todo lo requerido. Obviamente, la antagonista de la Chilindrina-: linda y bruta.


¿ Personajes cotidianos?¿educativos? Confieso, esta vecindad no me simpatiza.  

No hay comentarios: