martes, mayo 22, 2012

Las huellas que me dejan a mí

Hay relaciones que uno establece en la vida que empiezan en un punto y acaban en otro que jamás se pensó. Existen lapsos de tiempo en los cuales uno convive laboralmente con tiempos que son finitos, y sin embargo… la vida nos va devolviendo ciertos lazos que nacieron tiempo atrás y que uno hubiera pensado que se habían terminado en ese momento.
Conozco a muchas personas, que hoy tienen no más de 36 años y al menos por dos o tres años estuvimos dentro de un salón de clase durante cinco horas a la semana, durante 36 semanas al año…Nos vimos todos los días, nos saludamos todos los días, algunos hasta con beso volado todas las mañanas cuando llegaban a clase. Fui testigo de sus desazones, de sus dudas, de algunas decisiones equivocadas, de sus miedos, de sus carcajadas y a veces, de sus llantos. Sin ser dramática, entendí y sigo entiendo que hay química y a veces no la hay, que hay confianza y a veces no la hay… Si la hay, pueden darse relaciones maravillosas.
Me place tanto confirmar que de mi labor docente conservo esas relaciones que se alimentan no solo de recuerdos, si no de reflexiones, de cariño, de amistad. Personas de carne y hueso que no solo son un recuerdo, sino justamente eso: seres humanos que no llevo acartonados y perdidos en un Anuario, y cuya foto podría revisar cuando quisiera.  Personas que vienen y se van… sí las hay, pero tengo tantos que trascienden, que se quedan conmigo…Hombres y mujeres que son padres, que son madres, que saltan a la aventura matrimonial, al negocio propio, a los proyectos que no se acaban. Adultos que se cuestionan que caótica es la adolescencia hoy en día… adultos que se asustan del futuro de sus hijos… adultos que recuerdan cuando tenían 15 años y el mundo ni les importaba y todo parecía tan fácil y complicado a la vez.
Y el cariño y la química… no se la tragó la distancia, ni los años, ni el pasar de la vida.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Claudia, Me emocionó mucho tu post. Es lindo haberte tenido de profesora, además una profesora que disfruté mucho, no sólo por tu personalidad y forma de comunicarte con tus alumnos, sino además por el contenido de tu clase, tu manera divertida y apasionante de enseñar. Ahora además te tengo de amiga, confidente...
Una suerte para mi !!!
Te quiero mucho !
Viva

Anónimo dijo...

Cuando vas a publicar tus escritos entre dos tapas... casi como en carne y hueso... pero mejor todavía ... sobre papel con tinta???

Hemos hablado de esto antes...sigue la oferta de ilustrar tus textos con mis imágenes.

Siendo la digna hija de tu padre... tienes que llegar a la edición. Todos lo esperamos!

cariños
anamaria

@ido__ido dijo...

qué gran razón tienes :-)

Huellas que te dejan a ti y huellas que tu dejas en nosotros :-)

Un besote!