jueves, junio 05, 2008

Pecados Capitales 4: LA SOBERBIA

No estoy de acuerdo cuando a este pecado capital también se le llama orgullo. Considero que tener orgullo es bueno, uno debe sentirse contento consigo mismo: es la base de la inalcanzable felicidad. Por lo tanto, voy a distinguir bien: la soberbia es sinónimo de arrogancia, pedantería.
¿Cómo veo personificado este pecado?, ¿En quién? … pues en Alan García…. ¿o no?
Caminadita, tono de voz, postura de los hombros, pecho/ panza enchidos en una constante lucha contra la gravedad, nariz con un ligera elevación y una humildad que brilla por su ausencia. Un pavo real que de pavo sólo la pechuga -grasosa en su caso- y de real ni mierda.
No obstante, la soberbia es ese tipo de pecado que cuando uno lo comete es difícil de aceptar, uno no anda por ahí diciendo: soy soberbio, soy arrogante, soy pedante, no es como decir soy perezoso, porque sería políticamente incorrecto.
¡Pucha! No puedo enumerar ejemplos de soberbia que dan vueltas en mi cabeza. Pero creo que basta con pensar el segundo que cualquier ser humano se siente superior a alguien porque tiene algo mejor, porque obtuvo alguna cosa primero, porque tiene fuerza física, porque tiene un tono más claro de piel, porque tiene ojos claros, porque habla español y no quechua, porque tiene dinero, porque tiene poder….. Dante los mete al fango.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gusta que se diferencie la soberbia del orgullo! El orgullo puede producir cosas buenas, hace que sea mas facil levantarse despues de una caida!

Pero por otro lado, la linea entre orgullo y soberbia suele ser delgada, no?