viernes, diciembre 28, 2007

Relecturas

Las re-lecturas son buenas, tienen su propio encanto puesto que volvemos a recorrer una camino agradable pero con otros ojos. No obstante, corremos un riesgo, que no disfrutemos como lo hicimos la primera vez: cuestión de probar. Es decir, abre el libro, si no te gusta... simple: lo dejas.
Por cuestiones de trabajo hay textos que tengo que leer una y otra vez, y sin embargo, no me cansan, además a estas alturas de mi vida la memoria me está empezando a jugar malas pasadas y descubro frases que me sorprenden como si fuera la primera vez.
¿Cuáles son las relecturas que he disfrutado al máximo? El amor en los tiempos del cólera, comparto esta cita: "Habían sorteado juntos las incomprensiones cotidianas, los odios instantáneos, las porquerías recíprocas y los fabulosos relámpagos de gloria de la complicidad conyugal. Fue la época en que se amaron mejor, sin prisa y sin excesos, ambos fueron más conscientes y agradecidos de sus victorias inverosímiles contra la adversidad. La vida había de depararles todavía otras pruebas mortales, por supuesto, pero ya no importaba: estaban en la otra orilla"
Luego, Cien años de soledad me he muerto de risa con una escena " (...) la mujer miró a José Arcadio y examinó con una especie de fervor patético su magnífico animal en reposo. -Muchacho- exclamó-, que Dios te la conserve."
Mi relectura de La tregua de Mario Benedetti fue más sentida y debe ser que estoy más susceptible, pero lo que pasa entre Avellaneda y Martín Santomé no es ficción, es la vida misma. "la felicidad, la verdadera felicidad, es un estado mucho menos angélico y hasta bastante menos agradable de lo que uno tiende siempre a soñar. La gente acaba por lo general sintiéndose desgraciada, nada más que por haber creído que la felicidad era una permanente sensación de indefinible bienestar, de gozoso éxtasis, de festival perpetuo." o "Es evidente que Dios me concedió un destino oscuro. Ni siquiera cruel. Simplemente oscuro. Es evidente que me concedió una tregua. Al principio me resistí a creer que eso pudiera ser la felicidad. Me resistí con todas mis fuerzas, después me di por vencido y lo creí. Pero no era la felicidad, era sólo una tregua. Ahora estoy otra vez metido en mi destino. Y es más oscuro que antes, mucho más."
Volví a revisar Amantes y enemigos y los dejo con varias frases, no puedo negar que Rosa Montero me encanta, y he contraído una deuda personal: quiero releer todos sus libros. Se querían mucho los dos, de eso estaba seguro: con un amor antiguo y animal, con la costumbre de quien ha compartido infinidad de gripes y de insomnios, con el mismo entrañamiento con que quieres a ese hermano con el que nunca sabes de qué hablar. Y aquí otra: Porque uno siempre es inocente cuando ama, siempre regresa a la misma edad emocional, al umbral de la eterna adolescencia. Pura y hermosa fui porque deseé y me desearon. El amor es una mentira, pero funciona.

Tengo una lista de autores cuyas obras quiero volver a revisar, solamente pido que la vida, la maldita responsabilidad de vivir y todo lo demás me dé tiempo para lograrlo.

No hay comentarios: